viernes, 5 de febrero de 2010

Zeitgeist



Vi Zeitgeist. Y, como todo el que la vio, me la pasé diciendo "Sí" con la cabeza durante las 2 horas largas que dura el documental.

Durante éste mes voy a postear algunas cuestiones del documental que veo interesante compartir. Sobretodo para destacar lo que creo importante y que deberíamos estudiar de memoria y tenerlo marcado a fuego en nuestras cabezas para no olvidar nunca que es lo que verdaderamente somos, y lo que ineficazmente tratámos a diario evitar ser:

OVEJAS.

“Debe parecerles difícil a los que han aceptado la autoridad como la verdad en lugar de la verdad como autoridad”
G. Massey (Egiptólogo)

“La religión nunca podrá reformar a la humanidad porque la religión es ESCLAVITUD”
Robert G. Ingergoll (1833 – 1899)


En un programa de TV Norteamericano en 1976 (hace miles de años) una especie de Jorge Lanata Yankie, advierte a la población cuetiones que hoy nos perturban a nosotros, en 2009:

“No tengo que decirles que las cosas están mal, todo el mundo sabe que están mal. El dólar vale monedas, los bancos están quebrando, los vendedores guardan un arma bajo el mostrador, los punks corretean salvajemente por las calles y no hay nadie en ningún sitio que sepa qué hacer. No hay fin para esto.
Sabemos que el aire no es apto para respirarlo y que la comida no es apta para ser comida.
Nos sentamos mirando nuestra TV mientras algún locutor local nos dice que hoy ha habido 15 homicidios, 63 crímenes violentos, como si esa fuera la forma en que debe ser!.
Sabemos que las cosas están mal, ¡peor que mal! ¡es una locura! Es como si todo en todos lados estuviera enloquecido, así que no salimos mas, nos sentamos en la casa y lentamente el mundo en que vivimos se vuelve mas pequeño, y todo lo que decimos es - ¡Por favor, al menos déjennos tranquilos en nuestra sala de estar!, ´Déjenme tener mi tostadora, mi TV, mi radio ¡Y no diré nada!... Solo déjennos tranquilos!
Bueno no voy a dejarlos tranquilos, ¡Quiero hacerlos enojar!
No quiero que protesten, no quiero que escriban a los miembros del congreso, porque no sé qué decirles que escriban, no se que hacer con la depresión y los rusos y el crímen en las calles, todo lo que se es que primero deben enojarse, tienen que decir:
¡Soy un ser humano, maldita sea; mi vida tiene valor!!!”


Y por último, y para cerrar ésta simpática entrega, Un discurso de JF Kennedy, anterior a su asesinato, en donde cláramente pide ayuda, ya que se vé cercado por los banqueros que finalmente lo asesinaron:

“Damas y caballeros:
La propia palabra “secreto” es repugnante en una sociedad libre y abierta; y nosotros como personas, intrínseca e históricamente, nos hemos opuesto a las sociedades secretas, a juramentos secretos y a procedimientos secretos.
Porque nos enfrenta en todo el mundo una conspiración monolítica y despiadada que se basa principalmente en medios encubiertos, para expandir su esfera de influencia basada en “infiltración” en lugar de invasión, en subversión en lugar de elecciones, en intimidación en lugar de libre elección.
Es un sistema que ha conscripto vastos recursos humanos y materiales para construir una máquina eficaz estrechamente tejida, que combina operaciones militares, diplomáticas, de inteligencia, económicas, científicas y políticas.
Sus preparativos son ocultos. No se publican. Sus errores son quemados, no salen en los periódicos.
Sus disidentes son silenciados, no elogiados. No se cuestionan los gastos, no se revelan los secretos.
Es por eso que el legislador ateniense Solon decretó como delito que los ciudadanos se aparten de las controversias.
Pido su ayuda en la tremenda tarea de informar y alertar a la población norteamericana, confiando que con su ayuda, los hombres serán como habrán nacido: Libres e independientes”
John Fitzgerald Kennedy



Los que no vieron Zeitgeist, deberían hacerlo, por supuesto es complicado ya que defenestra con pruebas contundentes un montón de situaciones cotidianas que vivimos todos los seres humanos, y por consiguiente no la conseguirán en un video club. y para bajarla también se complica.

Pero insistan, es muy agridulce la sensación de "Yo lo sabía - Uy, Dió!" que genera.


Un beso grande

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